Estos son los mejores momentos del día para cepillarse los dientes, según los odontólogos
En el mundo existen dos tipos de personas: quienes se cepillan los dientes antes del desayuno y quienes lo hacen después. Pero, ¿quién tiene la razón? Como suele suceder con los temas de salud, la respuesta varía según la situación y las necesidades individuales. Aunque hay distintas posturas en la comunidad dental, el Dr. Jossen Gastelum, un dentista radicado en Phoenix conocido en TikTok como @doctorjossen, defiende cepillarse antes de desayunar.
- “Cepillarse antes del desayuno crea una capa protectora en los dientes y estimula la saliva, que es crucial por las mañanas”, explicó Gastelum a Fortune.
- “Mientras dormimos, el flujo salival disminuye, lo que deja a muchas personas con sequedad bucal. La saliva amortigua la acidez en la boca, por lo que los dientes están más expuestos a ataques ácidos al despertar, además del típico mal aliento matutino”.
Los consejos del odontólogo
Si se prefiere cepillar después de desayunar, el dentista sugiere esperar al menos 30 minutos tras comer. Los alimentos y bebidas, como el café, pueden incrementar la acidez en la boca, lo que hace que cepillarse inmediatamente pueda dañar el esmalte. La Asociación Dental Americana incluso recomienda esperar una hora antes de cepillarse.
“La saliva necesita aproximadamente 30 minutos para neutralizar los ácidos en la boca”, señala Gastelum al medio. Mientras tanto, recomienda enjuagarse con agua o usar un enjuague alcalino, para ayudar en el proceso mientras la saliva actúa.
¿Con qué frecuencia hay que cepillarse los dientes?
Los expertos coinciden en que cepillarse dos veces al día es fundamental: por la mañana y antes de acostarse. “Ambos momentos son esenciales, pero el cepillado nocturno es particularmente importante para eliminar la placa acumulada durante el día”, comenta Gastelum. “A los niños les digo: cepíllense por la noche para mantener sus dientes, y por la mañana para mantener a sus amigos”.
Si se decide hacerlo al mediodía, por ejemplo, después del almuerzo, también es clave esperar al menos 30 minutos para proteger el esmalte de los ácidos de los alimentos. Sin embargo, Gastelum advierte que cepillarse más veces no significa necesariamente una mejor salud bucal. “Muchas personas piensan que cuanto más se cepillen, mejor. Pero lo importante es hacerlo correctamente, no obsesionarse. Un buen cepillado por la mañana y otro antes de dormir es suficiente para la mayoría de las personas”, revela en la entrevista.
Técnicas para un cepillado eficaz
El uso de un cepillo de dientes suave o extra suave es lo más recomendado. Los adultos deben usar una cantidad de pasta dental equivalente a un guisante y sostener el cepillo en un ángulo de 45 grados hacia las encías, realizando movimientos cortos hacia adelante y atrás para cubrir todas las superficies de los dientes.
“Si tienes un cepillo eléctrico, aplica una presión muy ligera y desliza el cepillo por cada diente, también en un ángulo de 45 grados hacia las encías”, sugiere Gastelum. “Deja que el cepillo haga el trabajo para el que fue diseñado”.
Además, es importante reemplazar el cepillo de dientes cada tres o cuatro meses o después de haber estado enfermo.
Más allá del cepillado: cómo proteger la salud bucal
Mantener una buena higiene bucal no solo beneficia los dientes y encías, sino que también es un indicador de salud general. El uso diario de hilo dental es clave para prevenir caries y mantener la salud de las encías. Herramientas como los irrigadores bucales pueden ser útiles para personas con dificultades de destreza. Además, el raspado de lengua ayuda a eliminar bacterias y a reducir el mal aliento.
El uso de enjuague bucal antes del cepillado también puede ser beneficioso, aunque los enjuagues a base de alcohol deben evitarse para prevenir la sequedad bucal.
Si cuesta seguir una rutina, Gastelum recomienda elegir una pasta de dientes con un sabor agradable, invertir en un cepillo eléctrico con temporizador y convertir el cepillado en una actividad compartida con familiares o amigos. “Cepillarse en compañía fomenta conexiones y ayuda a crear un hábito constante”, concluye el especialista.
LA NACION