Cómo funcionan las bicisendas porteñas y cuánta gente la usa a diario
Según datos del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el 81% de los porteños evalúa el sistema de bicisendas de forma positiva. Acorde al informe, el 55% señala que debería extenderse la traza, mientras que un 27% asegura que la extensión actual es la correcta. En menor medida, están quienes consideran que deberían reducirse (8%) o eliminarse por completo (6%).
La red de ciclovías conecta los 48 barrios porteños y supera los 310 kilómetros de extensión; comparte así el podio sudamericano junto con la bogotana, en Colombia y la limeña, en Perú. Si se amplía el foco a Latinoamérica, aparece el Distrito Federal de México: tiene una de las redes más extensas de la región, superando los 573 kilómetros.
“La bicicleta no es solo una alternativa, es una solución. Ciudades más seguras, limpias y eficientes dependen de infraestructura que priorice a peatones y ciclistas. Seguimos sumando kilómetros para movernos mejor”, afirmó el ministro de Movilidad e Infraestructura de la Ciudad, Pablo Bereciartúa.
A raíz de la aceptación y el uso de las ciclovías porteñas, el Gobierno avanza con el ensanche de la bicisenda en la calle Gorriti. Según relevamientos, se trata de un corredor de 3,2 km que es utilizado por más de 2000 ciclistas a diario.
Esto será el primer paso para la renovación de otros 12 kilómetros de la red existente y mejoras en infraestructura como la señalización y repavimentación de cunetas. Se calcula que todos los días se hacen más de 400.000 viajes en bicicleta en la Ciudad de Buenos Aires.
De Ámsterdam a Buenos Aires
La historia de la bicicleta como medio de transporte está ligada a las transformaciones sociales y urbanísticas en diversas partes del mundo. Ámsterdam, Países Bajos, es uno de los modelos que inspiró a Buenos Aires cuando, en 2009, comenzaron a trazarse las primeras rutas ciclísticas.
Ámsterdam es hoy la capital mundial de la bicicleta, pero no siempre fue así: el aumento en los accidentes de tránsito, especialmente de chicos, provocó un fuerte movimiento social que impulsó la creación de infraestructura segura para los ciclistas. A partir de la década de 1970, la ciudad invirtió fuertemente en carriles exclusivos, transformándose en un modelo a seguir.
En la Argentina, la red de ciclovías porteñas protegidas comenzó a construirse en 2009. El programa “Mejor en Bici” de 2010 tenía como objetivo inicial crear una red de 100 kilómetros, con bicisendas de doble sentido en calles secundarias. La primera ciclovía de la red fue inaugurada en el barrio de La Boca. Desde entonces, se superó los 100 kilómetros de extensión en 2013 y llegó a los 200 kilómetros en 2018. Durante este período, el uso de la bicicleta se cuadruplicó, pasando de representar el 0,9% de los viajes al 4% antes de la pandemia.
En el último tiempo, se llevaron adelante obras de ensanche y modernización de la bicisenda de la Ciudad de Buenos Aires. Por ejemplo, el ensanche y extensión del recorrido de Billinghurst o la creación de una nueva ciclovía entre Av. Cabildo y Parque Saavedra.
El objetivo, explican, es continuar con las obras de modernización y creación de nuevo trazado para ampliar la red en toda la ciudad.
Un cruce por las bicisendas
Hace unos días, se produjo un debate en la red social X entre Lilia Lemoine, legisladora de La Libertad Avanza (LLA) y Myriam Bregman, dirigente del Frente de Izquierda.
“Casi me atropella una bicicleta que venía en contramano. No odiamos lo suficiente a las bicisendas”, publicó Lemoine. Ante los comentarios de sus seguidores y otros usuarios que la cuestionaban, se justificó y explicó: “Uno mira el tránsito en una avenida… No la bicisenda”.
“Se mete hasta con las bicis, insoportable. Y no sabe que tiene que mirar para ambos lados”, le respondió Bregman.
Amplían la red de ciclovías de la Ciudad y ya es una de las más extensas de Latinoamérica LA NACION