Bukele celebró mil días sin homicidios en El Salvador: “Al fin podemos vivir en paz de verdad”
El presidente salvadoreño Nayib Bukele conmemoró un logro sin precedentes: mil días sin homicidios en El Salvador desde el inicio de su mandato el 1 de junio de 2019, marcando un contraste radical con la historia del país, que alguna vez fue considerado el más inseguro del mundo por la acción de las pandillas.
Este sábado, Bukele utilizó las redes sociales para anunciar y reflexionar sobre este hito. En lugar de un discurso formal, propuso una introspección sobre el pasado violento del país y las fuerzas que, según él, intentaron impedir este progreso.
Bukele manifestó que El Salvador se encamina a convertirse en uno de los países más seguros del mundo.
Mil días sin homicidios: el pasado violento de El Salvador
Antes de esta notable reducción en la violencia, El Salvador era un país devastado por la criminalidad. Las pandillas, como la Mara Salvatrucha (MS-13) y la Barrio 18, habían aterrorizado a la nación centroamericana por más de tres décadas, siendo consideradas organizaciones terroristas por la Corte Suprema desde 2015.
Estas bandas controlaban el 90% del territorio, imponiendo su propia justicia bajo la consigna de “ver, oír y callar”. Recaudaban aproximadamente U$S 2 mil millones en extorsiones y asesinaban a quienes se negaban a pagar.
El año 2015 fue uno de los más violentos de la historia salvadoreña, con 6.656 asesinatos y una tasa de homicidios de 106 por cada 100 mil habitantes, el más sangriento desde la guerra civil. La brutalidad alcanzó un punto crítico el 27 de marzo de 2022, cuando las pandillas asesinaron a 62 personas en un solo día en todo el país.
La estrategia de seguridad en El Salvador
En respuesta a la escalada de violencia de 2022, el Congreso salvadoreño aprobó, a solicitud de Bukele, el régimen de excepción para combatir a las pandillas. Esta estrategia implicó una serie de medidas contundentes:
- Despliegue masivo: miles de soldados y policías con fusiles M-16, apoyados por camiones artillados, realizaron registros casa por casa en barrios populosos. Actualmente, más de 30 mil efectivos uniformados continúan desplegados en las calles.
- Control carcelario extremo: el Gobierno decretó la emergencia en las cárceles, donde los reclusos permanecían en sus celdas “sin poder ver ni un rayo del sol”. Se les decomisaron las colchonetas y el Presidente advirtió que si los homicidios aumentaban, se les quitaría la comida a los pandilleros en prisión.
- Mega-prisión Cecot: se ordenó la construcción del Centro de Confinamiento al Terrorismo (Cecot), una de las prisiones de máxima seguridad más grandes de Latinoamérica, con capacidad para 40 mil reclusos, de los cuales actualmente hay 20 mil.
- Reformas penales: el Código Penal fue reformado para tipificar la pertenencia a una pandilla como delito, con penas de entre 20 y 40 años de prisión, y hasta 60 años para los cabecillas.
El Salvador: balance y controversias de las medidas de Bukele
El régimen de excepción conllevó la suspensión de derechos fundamentales. Los detenidos no tienen derecho a ser informados de los motivos de su arresto ni a tener acceso a un abogado. Las fuerzas de seguridad pueden intervenir las telecomunicaciones sin orden judicial, y el período de detención sin audiencia judicial se extendió de 72 horas a 15 días.
Según las autoridades, se capturaron más de 88.800 personas acusadas de pertenecer o tener vínculos con pandillas desde la entrada en vigor del régimen. Bukele afirmó que 8 mil personas inocentes fueron liberadas.
Sin embargo, organizaciones defensoras de los derechos humanos registraron más de 6 mil denuncias de víctimas bajo este régimen y documentaron que 442 personas murieron bajo custodia de las autoridades. La ONG Socorro Jurídico Humanitario sostiene que “el 94% de las personas [detenidas] no tenían perfil de pandilleros”.
*Con información de Agencia AP
El presidente salvadoreño Nayib Bukele conmemoró un logro sin precedentes: mil días sin homicidios en El Salvador desde el inicio de su mandato el 1 de junio de 2019, marcando un contraste radical con la historia del país, que alguna vez fue considerado el más inseguro del mundo por la acción de las pandillas. Este sábado, Bukele utilizó las redes sociales para anunciar y reflexionar sobre este hito. En lugar de un discurso formal, propuso una introspección sobre el pasado violento del país y las fuerzas que, según él, intentaron impedir este progreso. Bukele manifestó que El Salvador se encamina a convertirse en uno de los países más seguros del mundo. View this post on Instagram A post shared by Nayib Bukele (@nayibbukele)Mil días sin homicidios: el pasado violento de El SalvadorAntes de esta notable reducción en la violencia, El Salvador era un país devastado por la criminalidad. Las pandillas, como la Mara Salvatrucha (MS-13) y la Barrio 18, habían aterrorizado a la nación centroamericana por más de tres décadas, siendo consideradas organizaciones terroristas por la Corte Suprema desde 2015.Estas bandas controlaban el 90% del territorio, imponiendo su propia justicia bajo la consigna de “ver, oír y callar”. Recaudaban aproximadamente U$S 2 mil millones en extorsiones y asesinaban a quienes se negaban a pagar. El año 2015 fue uno de los más violentos de la historia salvadoreña, con 6.656 asesinatos y una tasa de homicidios de 106 por cada 100 mil habitantes, el más sangriento desde la guerra civil. La brutalidad alcanzó un punto crítico el 27 de marzo de 2022, cuando las pandillas asesinaron a 62 personas en un solo día en todo el país.La estrategia de seguridad en El SalvadorEn respuesta a la escalada de violencia de 2022, el Congreso salvadoreño aprobó, a solicitud de Bukele, el régimen de excepción para combatir a las pandillas. Esta estrategia implicó una serie de medidas contundentes:Despliegue masivo: miles de soldados y policías con fusiles M-16, apoyados por camiones artillados, realizaron registros casa por casa en barrios populosos. Actualmente, más de 30 mil efectivos uniformados continúan desplegados en las calles.Control carcelario extremo: el Gobierno decretó la emergencia en las cárceles, donde los reclusos permanecían en sus celdas “sin poder ver ni un rayo del sol”. Se les decomisaron las colchonetas y el Presidente advirtió que si los homicidios aumentaban, se les quitaría la comida a los pandilleros en prisión.Mega-prisión Cecot: se ordenó la construcción del Centro de Confinamiento al Terrorismo (Cecot), una de las prisiones de máxima seguridad más grandes de Latinoamérica, con capacidad para 40 mil reclusos, de los cuales actualmente hay 20 mil.Reformas penales: el Código Penal fue reformado para tipificar la pertenencia a una pandilla como delito, con penas de entre 20 y 40 años de prisión, y hasta 60 años para los cabecillas.El Salvador: balance y controversias de las medidas de BukeleEl régimen de excepción conllevó la suspensión de derechos fundamentales. Los detenidos no tienen derecho a ser informados de los motivos de su arresto ni a tener acceso a un abogado. Las fuerzas de seguridad pueden intervenir las telecomunicaciones sin orden judicial, y el período de detención sin audiencia judicial se extendió de 72 horas a 15 días.Según las autoridades, se capturaron más de 88.800 personas acusadas de pertenecer o tener vínculos con pandillas desde la entrada en vigor del régimen. Bukele afirmó que 8 mil personas inocentes fueron liberadas.Sin embargo, organizaciones defensoras de los derechos humanos registraron más de 6 mil denuncias de víctimas bajo este régimen y documentaron que 442 personas murieron bajo custodia de las autoridades. La ONG Socorro Jurídico Humanitario sostiene que “el 94% de las personas [detenidas] no tenían perfil de pandilleros”.*Con información de Agencia AP La Voz