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Proyectan que los precios pagados a los tamberos se mantengan estables en la primavera

La producción de leche en la Argentina registró un crecimiento del 11% entre enero y julio de 2025 en comparación con el mismo período de 2024. De manera simultánea, el consumo doméstico mostró una recuperación, al pasar de 170 a 190 litros equivalentes por habitante y por año. “Se trata de un salto relevante en el marco de una economía en proceso de ajuste”, destaca el consultor Marcos Snyder. No obstante, aclara que “el repunte se produjo a costa de menores valores constantes, porque el precio del litro equivalente industrial cayó un 7% en términos reales, al comparar junio de 2025 versus junio de 2024”. En otras palabras: si bien el consumidor adquirió mayor volumen, los ingresos de la cadena se vieron erosionados por la inflación.

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En el plano externo, las exportaciones reaccionaron favorablemente en un escenario internacional de elevada demanda, lo que permitió retirar excedentes del mercado interno. Sin embargo, las existencias de productos terminados en cámaras industriales se ubicaron un 5% por encima de 2024, con un stock compuesto en un 70% por quesos, de más difícil colocación que la leche en polvo.

Respecto de los precios al productor, agosto cerró con 473,7 $/litro, con 13,1% de aumento respecto de agosto de 2024, mientras la inflación mayorista del periodo fue de 23,1%. La industria procesadora redujo el valor de la leche cruda en moneda constante, pero en una proporción más o menos similar a la que cayeron sus propios valores de venta. Este escenarios refleja que, “pese al incremento en la producción, la competencia por asegurar la provisión de leche continúa vigente, dado que ningún procesador, de los grandes, está dispuesto a perder materia prima en un contexto en el que el consumo interno podría seguir mejorando en el corto plazo, mientras que las exportaciones sostienen un piso de demanda”, proyecta Marcos Snyder.

En síntesis, el analista estima que los precios al productor tenderán a mantenerse estables en los primeros tramos de la primavera, probablemente cercano al promedio histórico en dólares. En tanto, la industria láctea, con un margen de maniobra limitado, necesita asegurarse el abastecimiento de materia prima y no puede profundizar la reducción de precios sin arriesgar la fidelidad de sus proveedores.

​En dólares, se estima que serán similares al promedio histórico, según el consultor Marcos Snyder  LA NACION