LA INSEGURIDAD Y LA VIOLENCIA CRECEN DIA A DIA EN LA CIUDAD

asaltaron a taxista lo golpearon, robaron 5000 y llevaron el auto para incendiarlo luego .

Los compañeros de trabajo de Masey lanzaron una campaña para recaudar fondos y pagar el auto destruido. El alias de la cuenta bancaria es taxi.354.masey.

Hace tres meses, Juan Carlos Masey pudo cumplir su sueño de tener su auto propio con licencia de taxi y no depender de un patrón. Acordó con el dueño del auto la compra, tras la entrega de un vehículo, un dinero que tenía ahorrado y el resto en 36 cuotas.

Eugenia, la hija de Juan Carlos, indicó que “era la segunda cuota que pagaba del auto” y que “lamentablemente hay alguien que te rompe las ilusiones”.

“Lo importante es que mi papá está bien, al margen de algunos golpes. Levantarnos con esta noticia fue horrible”, agregó Eugenia.

Sostuvo: “Gracias a Dios mi papá está bien, que es lo más importante; lamentablemente, a los buenos les pasa esto».

Pasadas las 23.30 del miércoles, un pasajero de unos 30 años subió al taxi estacionado sobre calle Sobremonte en la plaza central para dirigirse a una obra en construcción en la zona del complejo El Aguila, pasando calle Río Negro, en barrio Las Quintas, en el noroeste de la ciudad.

El taxista comentó que el sujeto se bajó al lugar, golpeó y como nadie lo atendió pidió que lo llevara a la casa de un compañero que tendría la llave en barrio San Antonio de Padua, sobre calle Estrada Norte casi Río Segundo.

En el lugar, no encontró a nadie, relató Masey, por lo que volvió al sector donde estaba la obra en construcción. “Cuando llegamos me preguntó cuánto es el dinero por el viaje, le mostré el importe que marcaba la ticketera. 5.200 pesos».

Es en ese momento que el delincuente, quien iba sentado en el asiento trasero, lo agarra del cuello a Juan Carlos para ahorcarlo. El taxista «manotea» unos cubiertos que guardaba a un costado del asiento y le provoca un corte en la mano al atacante, lo que lo obliga a soltarlo.

Se bajan del auto y comienzan a forcejear hasta que el ladrón le aplicó un fuerte golpe en la cabeza, que lo tira al suelo y le tapa la cara con la capucha del buzo. “Me dejó un poco inconsciente y cuando reacciono escuché que cerraba la puerta y se llevaba el auto”, describió Masey.

Junto con el auto el delincuente se llevó el teléfono celular, documentos, estudios y pastillas de las diabetes, tarjetas y unos 5.000 pesos, detalló la víctima.

A los pocos minutos, la policía encontró el Fiat Siena, modelo 2017, envuelto en llamas sobre avenida costanera sur y Río Juramento.

Los bomberos sofocaron las llamas, pero los daños fueron totales, afectando la parte del motor y el habitáculo.

«Ya no tengo más ganas de nada, no tengo ganas de volver a empezar», se lamentó

Tras la denuncia realizada en la subcomisaría Abilene, se inició una investigación para tratar de dar con el delincuente, a partir del chequeo de cámaras de seguridad desde el momento que subió al taxi en Plaza Roca.

Reclaman más controles al Municipio

El nuevo hecho de inseguridad sufrido por el taxista Juan Carlos Masey generó la reacción y el reclamo de sus colegas, por lo que piden más seguridad y que en los controles también incluya a los pasajeros.

En medio de la indignación por el violento asalto sufrido por el chofer de 60 años en el oeste de la ciudad, los compañeros de Masey convocaron a un encuentro que se desarrollaba anoche en la sede del gremio.

Había diferentes alternativas a la hora de peticionar mayor seguridad a las autoridades municipales, mientras que otro grupo era más intransigente y se pronunció en convocar a una protesta para el próximo lunes.

Los trabajadores del volante señalaron que se siguen repitiendo los hechos delictivos, aunque no eran tan violentos y extremos como el sufrido por Masey, que terminó con su automóvil totalmente destruido, tras ser incendiado por el delincuente.

Fuentes policiales indicaron anoche que a partir de los datos brindados por la víctima y las cámaras de vigilancia analizadas se mostraron confiados en llegar al delincuente.

Además, un dato que lo incriminaría sería el corte que tiene en una de sus manos, cuando Masey tomó un tenedor y le aplicó un puntazo cuando era tomado del cuello.